miércoles

Una nueva lectura, un nuevo hallazgo

ilustración de Stéphane Jorisch

Es difícil conocer con exactitud los 400 títulos que tiene el programa de biblioterapia Leer Para Sanar, por lo que siempre hay una oportunidad de disfrutar al lado de los pacientes de una nueva experiencia literaria. Doña Eva  y Doña Ana María, dos abuelas hospitalizadas y compañeras de habitación, fueron las directas responsables de una nueva aventura literaria, ya que quisieron compartir una lectura en voz alta al lado de Andrés (nieto de Doña Ana María). El cuento que escogieron para entretenerse esa mañana fue “La colcha de la abuela”.

Confieso que el libro me conmovió profundamente, por el manejo que le da la escritora Paulette Bourgeois a una de las historias más tristes que se viven en Estados Unidos, el momento en el que los adultos mayores son llevados a los ancianatos para que terminen la última parte de su vida lejos del hogar en el pasaron la mayor parte de su existencia. La historia tiene un final relativamente feliz, en el que muestra la adaptación de la abuela gracias a la compañía frecuente de su nieta, quién decide hacerle una colcha de regalo muy especial que ayuda a resignificar la vida de la abuela.

En lo más interesante de la historia, la enfermera Martha Cárdenas llegó a realizar alguna actividad de rutina, y me dijo mirando a las pacientes: “Hola profe, ¿Cómo va? ¿Si le estan poniendo cuidado?” Esta pregunta nos sacó una carcajada a todos, y nos dejó en el ambiente una pizca de humor que se mezcló con la lectura del cuento y la hizo más dulce.
Por eso, va a ser muy difícil recordar este libro de “La colcha de la abuela” sin relacionarlo con tan hermosas personas que puedo conocer gracias al trabajo de mediación de lectura.